domingo, 26 de octubre de 2025

¡Venid, antes de que la Flor del Corazón Muera! La Flor tiene Sed y Yo la Nutro con Mi Palabra de Vida

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a Christine en Francia el 24 de octubre de 2025

[EL SEÑOR] El maná descenderá del Cielo, siempre desciende el maná para que el hombre lo reciba!

Hijos, cuando os hablo de la tribulación venidera, no podéis oír porque no podéis ver ni concebir que más allá del dolor viene el éxtasis y que ese éxtasis se produce por medio del dolor; es dado como lo es la victoria de la vida sobre la muerte. La muerte es solo una máscara detrás de la cual reina la vida. El hombre muda su piel para elevarse, y así ocurre con todas las etapas de evolución.

Camina adelante, Yo te sigo, pero también camino delante de ti para guiarte y mostrarte el camino. Siempre baja tu voz para oír la Mía, y ven a poner tu corazón contra Mi Corazón para oír Mi voz, sigue Mi mirada, entra en Mi mirada! El sol ilumina el camino del humilde, pero el camino del orgulloso ya está en agonía. Continúa por tu camino y siempre toma el sendero que te pido tomar; camina derecho por los senderos sinuosos y no te perderás. Estas son las palabras que doy a la humanidad, a todos vosotros que sois Míos y a quienes acompaño en cada momento, aunque a menudo me ignoréis y os burléis de mí. Vengo a traer el maná del Cielo a vuestros corazones y a colocar el vuelo de ascensión en vuestras almas. Llegará un día, hijos, en que todos volveréis a Mí, quien os espera, para acompañaros y guiaros en el Río Eterno de la Vida Eterna. Que los que tienen oídos escuchen, y entonces la llama volará hacia adelante, ardiendo dentro de ellos con el nuevo Fuego y mostrandoles el camino.

Hijos, os traigo Mi camino; caminad conmigo, venid a refrescar vuestros corazones en Mi Corazón. Siempre os digo: Yo soy el Agua Viva y el Fuego, el Fuego y el Agua Viva, y llevo Mi Vida dentro de vosotros para que permanezcáis en Mi Presencia, con el fin de ser nutridos por Mi Palabra. En la orilla, os dejaré un momento antes de alzarme, y sobre las alas de Mi Corazón, os llevaré muy alto hasta el Dominio de Mi Padre que es toda Gloria!

Hijos, no hay luto sino renacimiento; solo puede venir vida de la Vida. Hijos, la muerte es el nuevo camino de la vida. La vida, una vez dada, no tiene fin.

[Christine] ¡Oh Señor, muéstranos el camino!

[EL SEÑOR] El camino está en Mi Corazón dado para vosotros; Mi Corazón traspasado porque es traspasado por amor y la sangre que fluye es la Sangre de vida, una canción de amor que se derrama sobre la Tierra e irriga los ríos subterráneos, perfumándolos con Vida Divina, con Vida Divina.

Yo soy el Vigilante, Yo soy el Despertador, Yo soy el Amor que lleva el amor que mana y, en la Tierra, viene a irrigar los ríos subterráneos para perfumarlos con Vida Divina, Vida Divina.

Soy el Vigilante, soy el Despertador, soy el Amor que lleva el amor; todas las puertas del Infierno serán derribadas y todos los mentirosos y sepultureros serán aplastados. De la vida solo puede venir vida. Por medio de la muerte viene la muerte. Vida y muerte, ambas se entrelazan e intersecan, y en la muerte nace la vida. Hijos míos, no hay muerte eterna excepto el rechazo a Mi Ley, Mi Ley de vida, ley del amor. En el camino, no os durmáis sino vigilad, vigilad constantemente, vuestro corazón al llamado mío; yo os espero.

[Por la tarde]

[EL SEÑOR] Y vendréis a Mis atrios. Os traeré Agua Viva y Fuego, el Fuego que quemará en vuestras entrañas todo lo malo, todo aquello que no proviene de Mí y os hace prisioneros.

Hijos míos, vine a traer paz al mundo, pero el mundo no Me oyó. Continuó con sus fiestas, se dispersó, se disipó y cayó nuevamente bajo la tutela del que siembra desorden y discordia. Hijos míos, vengo a vosotros en estos tiempos de dolor y frialdad de corazones. Estáis adoptando las leyes de la Bestia y os perderéis; también os perderéis si continuáis escuchando la voz de los mentirosos. ¡No seáis sordos a Mis llamadas! Soy el Uno que viene dentro de vosotros para renovar vuestros hogares y traerles Agua Viva. Soy el Uno que Es y siempre permanece. Traigo paz a vuestros corazones y os libero de los mentirosos. Tomad Mi camino, caminad por el pequeño camino, aquel del Corazón que os llama y os trae liberación; no entréis en la hermosa Babilonia, porque os enterrará y os perderéis.

Mis amados hijos, en silencio os espero, también velo por vosotros e invito a venir. Venid, antes de que se marchite la flor del corazón. La flor tiene sed, y yo la nutro con Mi Palabra de vida. Venid a Mí, porque el mundo es perdición. Traedme vuestros corazones, y los llevaré a Mis atrios y los alimentaré con la Sangre de la Vid que soy, y os embriagaréis con Mi fragancia de amor.

Soy Amor, hijos míos, el Amor que llama a los suyos y viene a salvaros. Os llamo a Mi Vid, para liberaros de las garras de los malvados, los mentirosos y perversos, que os abusan para haceros caer. Soy el Uno que os nutre con Mi Palabra de vida; soy el Amor que se arrodilla ante vosotros para levantaros al Cielo de Mi Padre, vuestro Padre.

Hijos míos, hubo una vez una Tierra de Fuego(1), desaparecerá si los hombres continúan con sus fiestas, negaciones y mentiras. El mundo, vuestro mundo, está en agonía y es llamado a ser apagado. Vuestra mundo, hijos míos, tiene sed de verdad, de esplendor.

Hijos míos, humillaos e iniquidad será expulsada. Redescubrid la inocencia dentro de vosotros y los huertos florecerán nuevamente. Abrid vuestros ojos a la vigilia de Mi Corazón y seréis iluminados desde adentro. Hijos míos, el Manantial en vosotros fluye y se extiende, llevando Agua Viva al mundo invisible.

Orad, hijos míos, adorad, amad; el Cielo se arrodilla ante vosotros, a vuestra llamada, trayendo la maná del Cielo.

Próximamente, todos los vientos contrarios se levantarán si los hombres no se arrepienten; habrá grandes tribulaciones, grandes sufrimientos, y la Tierra vomitará su fuego; los vientos se levantarán y soplarán, los mares invadirán las tierras. La Tierra, sacudida por el hombre, clamará venganza, ¿y qué podréis hacer? Aprenderéis a inclinar vuestras cabezas y bajar vuestro orgullo. Será un tiempo de gran desolación que os mostrará cuán pobres y pequeños sois, y vuestra soberbia quedará en el lodo.

Venid a Mi Corazón para que Yo os traiga Agua Viva. Venid a Mi Corazón para que Yo os guíe hacia la Luz.

Niños, venid y no os disperséis. Corred hacia Mí y Yo os levantaré, entraréis en Mis atrios y gozaréis en Mis atrios. Venid, he preparado para vosotros el banquete nupcial, la Boda con el Cordero que soy Yo. Os espero, os invito al banquete de Mi Corazón, y conmigo viviréis, conmigo gozaréis, conmigo danzaréis.

Niños, vengo a poner Mis labios sobre los vuestros y nutriros con Mi Palabra de vida, Palabra de amor, Palabra de verdad, Palabra de vuestro Señor, Aquel al que llamáis Cristo y Señor —y Yo soy— yo, quien habla a este niño e invitaos al banquete nupcial del Cordero.

Amad como Yo os amo y no os disperséis, no os disipéis. Entrad en el silencio y, en Mis atrios, entrad por la oración del corazón. Os espero. Todos estáis invitados al Banquete Nupcial con el Cordero.

(1) Una tierra que ardió con el Fuego de la fe.

Fuente: ➥ MessagesDuCielAChristine.fr